Taste-Tea
El objetivo de este proyecto académico era diseñar un empaque innovador y funcional para presentar un té japonés, que rompa con el estándar de las cajas convencionales y proporcione una experiencia única al consumidor.
El público objetivo son personas interesadas en consumir té, especialmente aquellos que buscan productos innovadores y con un toque distintivo en su presentación.
Referentes
Dado que tenía que ser un empaque innovador, me embarqué en una búsqueda exhaustiva de diferentes referentes de empaques de té. Exploré una amplia gama de estilos, desde lo clásico y elegante hasta lo minimalista. Mi objetivo era encontrar la combinación perfecta de funcionalidad y estética que cautivara a los consumidores y destacara en el competitivo mercado del té. Investigué desde tradicionales cajas de cartón hasta envases biodegradables y diseños revolucionarios inspirados en la naturaleza misma del té. Cada hallazgo me brindaba nuevas ideas y perspectivas, impulsándome a alcanzar un nivel superior de innovación en mi propio diseño de empaque. Con cada detalle meticulosamente considerado, me sumergí en el desafío de crear un envase que no solo fuera visualmente impactante, sino también práctico y sostenible.
A partir de la búsqueda de referentes, consideré explorar el arte del origami para encontrar inspiración. El origami es una antigua técnica japonesa de plegado de papel que transforma una simple hoja en intrincadas formas tridimensionales mediante pliegues precisos y cuidadosamente ejecutados. Fascinada por la idea de fusionar la tradición con la innovación, me sumergí en el mundo del origami en busca de nuevas formas y estructuras que pudieran adaptarse al diseño de mi empaque de té. Después de una exploración exhaustiva y experimentación con diferentes técnicas de plegado, finalmente llegué a una forma que encapsulaba la esencia del té de una manera única y distintiva. Esta fusión entre la sofisticación del origami y la funcionalidad del empaque resultó en una pieza impresionante que no solo cumplía con los requisitos de innovación, sino que también destacaba como una obra de arte en sí misma.
Conclusiones de los referentes
Basándome en el proceso descrito y la búsqueda exhaustiva de referentes para el diseño del empaque de té, se pueden extraer varias conclusiones:
Diversidad de Inspiraciones: La búsqueda abarcó una amplia gama de estilos y materiales, desde lo clásico hasta lo revolucionario. Esto sugiere una mente abierta para explorar diversas fuentes de inspiración y la disposición a experimentar con diferentes enfoques de diseño.
Variedad de estilos: Se exploraron una amplia gama de estilos de empaques, desde lo clásico hasta lo minimalista y lo revolucionario. Esto indica una búsqueda diversificada para capturar elementos diferentes que podrían funcionar en el diseño final.
Fusión de tradición e innovación: La incorporación del arte del origami muestra una intención de fusionar la tradición con la innovación, lo que sugiere una apreciación por las técnicas artísticas antiguas y su adaptación a un contexto moderno.
Enfoque en la estética y la funcionalidad: Se hace hincapié en encontrar la combinación perfecta de funcionalidad y estética, lo que indica un compromiso con la experiencia del consumidor y la efectividad del empaque en el mercado.
Experimentación y creatividad: Se menciona la experimentación con diferentes técnicas de plegado y una búsqueda activa de nuevas formas y estructuras, lo que sugiere un enfoque creativo y abierto a la innovación.
Resultado único y distintivo: La fusión de la sofisticación del origami con la funcionalidad del empaque condujo a un diseño final que no solo cumplió con los requisitos de innovación, sino que también se destacó como una obra de arte en sí misma. Esto sugiere que el diseño fue exitoso en alcanzar sus objetivos de diferenciación y excelencia estética.
Forma packaging final
Proceso de diseño
Decidí enfocarme en el diseño de un té de naranja y jengibre, ya que ambos ingredientes son ampliamente cosechados en Japón. Esta elección no solo se basó en la popularidad y disponibilidad de estos productos en la región, sino también en el impacto positivo que tendría en los productores locales. Al optar por ingredientes locales, puedo contribuir directamente a la economía regional y apoyar a los agricultores japoneses que trabajan arduamente para cultivar estos sabrosos y beneficiosos productos. Además, al utilizar ingredientes frescos y de alta calidad provenientes de la región, puedo garantizar un producto final que resalta los sabores auténticos y la excelencia de los productos locales. Esta decisión no solo añade un componente de sostenibilidad y apoyo a la comunidad, sino que también agrega un valor cultural y un sentido de autenticidad al té, conectándolo más estrechamente con la tierra y las tradiciones japonesas.
Comencé el proceso de creación de los elementos gráficos esenciales que debían integrarse en el diseño del empaque. Mi primera tarea fue representar la planta de naranja de manera precisa y estilizada.
Después de diseñar los elementos gráficos, procedí a incorporar la información importante en el empaque. Decidí nombrar el té "Taste-Tea", un juego de palabras en inglés que se pronuncia como "tasty", que significa "sabroso" en español. Sin embargo, la marca escrita como "taste-tea" se traduce literalmente como "gusto-té". Para el logo del producto, añadí una taza al lado derecho de las letras y también incluí un dibujo lineal de una taza para reforzar la idea del té. Especifiqué que el té estaba hecho de jengibre y naranja para resaltar sus ingredientes principales. Además, resalté que el empaque era sostenible y estaba hecho de papel de piedra.
Para cada una de estas informaciones, proporcioné su traducción al japonés, asegurando que el empaque comunicara claramente tanto en inglés como en japonés. Esto no solo añade un toque auténtico y localizado al producto, sino que también facilita su comprensión para un público japonés.
Diseño final
Ximena Melgar
